Cuando uno va a comer a un restaurante lo hace con la intención de disfrutar al máximo de una comida preparada por verdaderos especialistas en los fogones, pero no es solo la comida lo que suele importar, sino que también se valora mucho la compañía. Se nos ocurren pocas cosas mejores para ti que venir a El Llagar de Titi y poder disfrutar de la rica y contundente gastronomía asturiana acompañado por tus amigos, pareja o familia. Con respecto a esta última, las familias son muy diferentes. Unas más numerosas que otras, desde luego, pero en muchas existe la presencia de niños. ¿Por qué vas a dejarlos sin probar todo lo bueno que puede aportar la región en cuanto a alimentos? ¿Por qué tienes que renunciar a llevarlos contigo por el hecho de que se pueden cansar antes y tienes que estar pendiente de los mismos? No hagas nada de esto, ya que nosotros estamos preparados. Vamos a contarte las ventajas de contar con una zona para niños.
Descubre las ventajas de contar con una zona para niños
¿Por qué queremos que sepas esto? Es fácil. Contamos con Titilandia, un espacio para los más pequeños. Sabemos que ellos, además de disfrutar con la comida, necesitan hacerlo de otra manera y por eso nos hemos esforzado al máximo para crear unas instalaciones en las que puedan jugar con la máxima diversión y seguridad. Ponemos a tu disposición un espacio cerrado que cuenta con mesas para que puedas tomar algo y comer, mientras tus hijos lo están pasando bien. También encontrarás mesas al aire libre, gozando esa misma zona de un castillo de juegos y dos mini campos de fútbol. Lo que también se van a encontrar los más jóvenes de la casa son camas elásticas perfectamente diseñadas para que coincidan mayores y pequeños, pista de mini fútbol, toboganes, columpios, casitas y un castillo de bolas. ¡Queremos que padre e hijos puedan disfrutar al mismo tiempo! Por cierto, si tienes mascota, también tenemos una zona para cuidar de ella.
Las ventajas de contar con una zona para niños son muchas y muy variadas. Lo primero es que no se van a aburrir en el momento en el que la comida se empieza a alargar debido a que los adultos buscan conversar y tomárselo con calma. En ese punto, los niños podrán disfrutar jugando y lo que es mejor, estarán también haciendo ejercicio, aprendiendo y, probablemente, interactuando con más chicas y chicos de su edad. Esto con respecto a los más pequeños, ahora llegan los beneficios para los adultos, que podrán relajarse sin estar pendientes de sus hijos y lo harán sabiendo que sus pequeños estarán divirtiéndose en las mejores condiciones.
Ya conoces las ventajas de contar con una zona para niños en un restaurante, así que ahora sólo queda que vengáis a disfrutar todos de la misma. ¡Os esperamos!
